Las puntas abiertas son el caballo de batalla de muchas melenas, especialmente las que se encuentran en el proceso de adquirir cierta longitud. La solución más certera e inmediata es cortar, pero muchas veces hacerlo ralentiza la consecución del objetivo, por lo que ahí suele ser de utilidad remedios y tratamientos que ayuden a sellarlas, al menos temporalmente.
Más necesario aún es hacerlo en verano cuando, como ya te contamos aquí, el sol daña el cabello junto al cloro, la sal o la arena, haciendo necesario adaptar la rutina para contrarrestar la sequedad y falta de brillo resultantes.
¿Qué hacer para cuidar las puntas del cabello?
Las puntas abiertas no son más que la separación de un cabello en dos o más fragmentos por el daño causado a la fibra capilar, normalmente en forma de tratamientos químicos (coloraciones o permanentes) o mecánicos (herramientas de peinado).
Muchas de las acciones que realizamos a diario pueden empeorar el aspecto del cabello. Así, no se trata tanto de qué hacer, sino de qué no hacer para evitar tener que reparar puntas abiertas y quemadas después. Olvídate de estas acciones y verás como tu melena de aspecto descuidado y encrespado mejora:
- Peinar excesiva o agresivamente.
- Abusar del secador, las planchas u otras herramientas de calor.
- Secar frotando con la toalla después de la ducha.
- Dormir sobre ropa de cama de materiales que friccionen la fibra capilar.
- Coloraciones químicas, permanentes o alisados, sobre todo cuando no se realizan convenientemente.
Todos estos gestos cotidianos afectan a la cutícula, erosionándola. Al final, cuantas menos capas tenga, más débil, tendente a la rotura y de aspecto fosco tendrá. Entonces,
¿Cómo reparar las puntas abiertas?
Evitar la aparición de las puntas abiertas puede ser sencillo si se siguen una serie de consejos:
- Presta atención al secado. El pelo es muy vulnerable cuando está húmedo, por eso cómo lo tratas desde que sales de la ducha hasta que está complemente peinado es tan importante. Lo mejor es secar con una toalla específica y siempre presionando para retirar suavemente el exceso de agua, nunca frotando, aunque tengas prisa por irte de casa. Después deja que seque al aire lo máximo posible antes de hacerlo con el secador para evitar el daño por exposición al calor.
- Invierte en un buen protector térmico. Aplícalo siempre que vayas a usar herramientas de calor y evita llegar con ellas a las puntas, céntrate en raíces y medios y si es posible déjalas al aire o con chorro frío de secador.
- Modera la temperatura de las planchas o tenacillas. No hace falta llegar a gradaciones infernales para dar forma o hacer que el resultado sea más duradero. Además, hacerlo elimina en el proceso la queratina que contribuye a que la melena se vea suave, fuerte, brillante y manejable.
- Apuesta por peines. Si tienes que desenredar utiliza uno de púas separadas y no el clásico cepillo que añade presión al folículo. Hazlo con calma y tiempo, primero en las puntas y luego hacia arriba para no arrastrar los nudos ni dar tirones.
- Elige ingredientes nutritivos en tu rutina. Las puntas abiertas no se pueden reparar para siempre, pero si hacerlas menos obvias, aportándoles toda la nutrición e hidratación que echan de menos. Así, en
La Provençale BIO contamos con un producto que se puede utilizar en el día a día de tu pelo. Se trata del Aceite de Belleza Multiusos , un producto polifacético cuya textura de aceite con acabado seco y no pegajoso permite que se absorba rápidamente sin dejar rastro, envolviéndote de un delicado aroma floral. Puedes usar este ritual de belleza para nutrir y reparar la piel del rostro y el cuerpo, además del cabello, ya que está enriquecido con aceite de oliva BIO y aceite de girasol para tratar intensamente. Tras la aplicación del producto se demostró que el cabello se sentía suave para un 83.8% de los participantes tras 4 semanas de uso, por lo que sirve perfectamente para mejorar su apariencia, potenciando el brillo y aspecto saludable.