Es probable que nunca te hayas parado a pensar cuantas veces, de media, parpadeas al día. La piel que rodea los ojos es muy fina y está en constante uso, nada menos que 10.000 veces aproximadamente hacemos este movimiento durante cada jornada. Por este motivo, es una zona que tiende a marcarse con mayor facilidad que otras. A menudo es capaz de delatar cómo has dormido, el ritmo de vida que llevas y tu edad, razones más que suficientes para poner el foco en cuidarla bien e incluir este paso como uno incuestionable dentro de la rutina de belleza diaria.
El contorno de ojos se utiliza principalmente para mejorar la hidratación y apariencia de esta zona. El uso de un cosmético de este tipo, como el Contorno de ojos anti-edad de La Provençale BIO con el aceite de oliva BIO o el agua de flor de aciano BIO como ingredientes principales, es capaz de atenuar líneas de expresión debidas a la sequedad y reducir visiblemente las bolsas y ojeras dando lugar a una mirada iluminada y visiblemente más joven y despierta. Utilizar este producto en combinación con una crema de día y/o noche, mantiene la piel del contorno de los ojos con un aspecto reposado. Al ser un sector del rostro más fino y frágil, tiene características específicas que requieren cuidados adaptados. Está prácticamente desprovista de la película hidrolipídica que protege la piel y con pocas glándulas sebáceas, por lo que la zona que rodea los ojos muestra fácilmente las líneas de expresión y tiende a envejecer más rápidamente que otras. Con las ojeras y las bolsas bajo el párpado inferior, los ojos parecen cansados y pierden su luminosidad. El uso de un producto específicamente formulado les da un impulso, eliminando y reduciendo los signos de fatiga, siendo capaz también de ayudar a ralentizar la aparición de diferentes tipos de arrugas.
Por otro lado, la composición de este cosmético es diferente a la de otros productos de cuidado de la cara, ya que está formulado específicamente para esta zona del rostro. En combinación con una crema específica para cada persona en la rutina de belleza, la crema del contorno de ojos es el arma definitiva para revivir la mirada.
Aunque mantener una buena higiene durante toda la vida es la clave para tener una piel bonita, la hidratación también desempeña un papel crucial en la salud de la piel. Se recomienda empezar a utilizar un contorno de ojos alrededor de los 25 años, edad en la que la renovación celular empieza a ralentizarse, tal y como te contamos en este artículo de La Provençale BIO sobre cómo cuidar esta zona. Las personas con una piel más seca pueden empezar antes, ya que esta suele envejecer prematuramente.
Como con cualquier otro tratamiento, se debe aplicar el contorno de ojos después de haber limpiado completamente el rostro. Si la rutina de belleza diaria incluye varios productos de cuidado, se utilizaría después del tónico y antes de la crema de día/noche. La manera correcta de aplicarlo sería cogiendo una pequeña cantidad de producto en la punta del dedo índice y colocándola en la piel que rodea la zona de los ojos. Con las yemas, se dan ligeros golpecitos en las esquinas interiores hacia las exteriores de los ojos, realizando el mismo movimiento bajo el arco de las cejas. Un error común es frotar el producto por la zona para que penetre, ya que se debe hacer de manera suave con pequeñas pulsaciones a través de los dedos. Este sutil masaje servirá también para activar la circulación sanguínea.
La frecuencia adecuada, siempre y cuando un uso de este tipo no genere irritación en la piel, y para que la zona del contorno de ojos permanezca hidratada sería de dos veces al día, utilizando este producto por la mañana y por la noche tras la higiene correspondiente del cutis.